Marcelino Champagnat
El fundador del Instituto de los Hermanos Maristas, se apasiona por Dios y se entrega con entusiasmo a favor de los niños y jóvenes, especialmente los más necesitados. Una comunidad internacional de hermanos y laicos de todo el mundo continúan hoy en día su sueño.
Marcelino, al ver a niños y jóvenes sin educación ni catecismo, exclama: "Necesitamos hermanos". El 2 de enero de 1817 inicia con dos jóvenes el proyecto del Instituto de los Hermanitos de María.
El papa Juan Pablo II canoniza a Marcelino el 18 de abril de 1999 en la plaza San Pedro del Vaticano y le reconoce como santo de la Iglesia universal.