Filosofía Marista
Hablar de lo Marista, es hablar de una novedad que el Espíritu Santo hizo surgir en el seno de la Iglesia y de humanidad. Este nuevo modo de ser, de vivir y actuar nos fue regalado en vista de un servicio, de una propuesta para ser realizado por aquellos que se adhieren a este proyecto, comprendiendo en él su propia vida. La fuente de este carisma es Marcelino Champagnat, joven sacerdote de la Francia post-revolucionaria que marcado por su contexto histórico personal y por todo lo que lo circundaba, fue fiel a lo que el Evangelio le fue inspirando.
Todo carisma es don de Dios. Este don va a caracterizar el SER (espíritu) y el HACER (misión) de una persona y/o de un grupo. El Carisma Marista es dado a Champagnat que lo transmite a sus primeros discípulos; juntos lo van sistematizando y lo incorporan a la historia. Cualquier hombre o mujer en el estado de vida al que fue llamado por el Señor; laico, sacerdotal o religioso está invitado a vivir este carisma. "Por la propia dinámica del don de Dios más que un patrimonio a conservar celosamente, es una riqueza a desarrollar y a comunicar al mundo actual.